Historia de las pestañas postizas:
¿Desde cuándo existen las extensiones de pestañas? Le sorprenderá saber que las mujeres llevan milenios buscando formas innovadoras de mejorar sus ojos y pestañas.
Puede resultar difícil de creer, pero piénselo por un momento. ¿Ha habido alguna vez en la que no haya querido lucir lo mejor posible? La belleza no es una moda. Durante siglos, las mujeres han experimentado con diversas formas de expresar su atractivo único a través de adiciones y cambios corporales.
Acompáñenos en un viaje por el pestañas postizas para principiantes desde el antiguo Egipto hasta nuestros días para ver cómo la necesidad, la demanda y el ciclo de las extensiones de pestañas han evolucionado a lo largo de los siglos, hasta culminar en la llegada de las extensiones de pestañas actuales en la década de 2000.
Objetivo de las pestañas
El atractivo estético de las pestañas suele ser el centro de atención. En la era Covid, aumentan las ventas de máscaras de pestañas, cosméticos para los ojos y pestañas postizas. Aunque las pestañas aportan atractivo a los ojos, también desempeñan un papel importante en la seguridad ocular.
¿Alguna vez se te ha atascado una mota de pelusa o un grano de arena en las pestañas? Así funcionan las pestañas como medida preventiva. Las pestañas actúan como primera línea de defensa de los ojos, impidiendo que la suciedad, el polvo, las pelusas y otros residuos penetren en los delicados tejidos oculares.
Las pestañas atrapan algunos restos voladores cuando los ojos están abiertos, pero cuando están cerradas, forman una barrera prácticamente impenetrable contra la entrada de agentes irritantes extraños en el ojo.
Aunque ya hemos hablado antes de las pestañas postizas, es importante conocer sus efectos. El pegamento utilizado para fijarlas a los párpados puede irritar los ojos. Cuando se utiliza un material extraño cerca de los ojos, como rímel, pestañas postizas u otros cosméticos, se corre el riesgo de sufrir infecciones y respuestas alérgicas. Si tienes que utilizarlos, hazlo con moderación y con el máximo cuidado cuando se trate de maquillaje y otros accesorios oculares.
Fondo de pestañas
Aumentar las pestañas tiene una larga historia, que se remonta a los egipcios en el 2500 a.C., cuando se utilizaban ungüentos y cepillos para darles un aspecto ondulado y en abanico. Tanto para hombres como para mujeres, los tratamientos de tinte eran muy populares.
La época romana
Plinio el Viejo, un antiguo autor romano, hizo aún más deseables las pestañas largas al afirmar que estaban vinculadas a la castidad. Plinio afirmaba, falsamente, que "el coito excesivo provocaba la caída de las pestañas, y era especialmente vital para las mujeres mantenerlas largas para establecer su castidad". En consecuencia, las mujeres se esforzaban por conseguir las pestañas más largas que pudieran.
La Edad Media
Las mujeres de la Edad Media se preocupaban más por su frente que por sus pestañas, ¡aunque parezca mentira! Puede sonar extraño, pero antiguamente se consideraba una característica encantadora. Se afeitaban las cejas y se depilaban las pestañas para resaltar la frente.
El siglo XIX
Según Racked, ha habido informes de mujeres a las que se les han insertado pestañas en los párpados utilizando agujas. Sí, era una técnica habitual, sobre todo en grandes ciudades como París. Las menos valientes probaron a pegarse pelo humano en los párpados en lugar de ensartárselo por aquella época, pero el método no tuvo mucho éxito y el pelo se caía con frecuencia.
La industria de las pestañas de 1900
Ahora, para conocer una tecnología de pestañas más avanzada, le damos la bienvenida al siglo XX. Karl Nessler, un conocido peluquero inglés, desarrolló en 1902 un procedimiento patentado para crear y tejer pestañas artificiales. En 1911, Anna Taylor, una canadiense, fue la primera en registrar una patente de pestañas artificiales. Lo consiguió creando una media luna de tela con pequeños agujeros.
Durante el rodaje de una película en 1916, D.W. Griffith, productor de cine de Hollywood, se convirtió en pionero de las pestañas. Al ver las tomas descartadas, sintió que a la actriz de cine mudo Seena Owen le faltaba algo. Pestañas bonitas y femeninas, para ser exactos. Griffith tuvo la idea de cambiar las pestañas de Owen. El peluquero residente de la película se encargó de hacer extensiones de pestañas de una mezcla de cabello humano y sintético.
Las pestañas realzadas se pusieron de moda en las décadas de 1940 y 1950 gracias a Hollywood. La industria de la belleza tomó nota y empezó a experimentar enseguida con distintos procedimientos de aplicación de pestañas.
La década de 2000
Si avanzamos hasta principios de la década de 2000, nos encontramos con las extensiones de pestañas modernas y los servicios que todos conocemos. Por supuesto, tiras de pestañas seguían siendo populares, pero gracias a celebridades como Paris Hilton y Jennifer López, la popularidad de este servicio de belleza se disparó. Las extensiones de pestañas se hicieron populares entre mujeres de todas las edades por su bajo mantenimiento y su aspecto más natural que las pestañas postizas.
Se abrieron paso en la corriente dominante gracias al uso de pestañas por parte de algunas de las mujeres más renombradas del mundo. Las pestañas postizas se venden hoy en día en casi todos los establecimientos de maquillaje. fabricantes de pestañas en línea, en tiendas de belleza y en todas partes
Quién inventó las pestañas postizas
En 1911, un inventor canadiense patentó las pestañas postizas.
A lo largo de la historia, las sociedades han apreciado las pestañas largas, y la gente ha probado diversos procedimientos para alcanzar estos estándares de belleza. Para proteger los ojos del sol del desierto, los antiguos egipcios utilizaban kohl y ungüentos para oscurecer las pestañas.
Las mujeres de la antigua Roma hacían lo mismo, pues creían que unas pestañas largas eran signo de pureza.
La primera máscara cosmética fue inventada en la época victoriana por el perfumista de la Reina Victoria Eugene Rimmel.
La inventora canadiense Anna Taylor obtuvo el 6 de junio de 1911 la patente estadounidense de unas "pestañas artificiales" similares a las que se utilizan hoy en día en cosmética.
Una afirmación muy extendida en las redes sociales está obligando a las usuarias de pestañas artificiales a enfrentarse a la supuesta sucia historia de este accesorio de belleza: Varias fotos famosas afirman falsamente que el accesorio cosmético fue diseñado por una prostituta del siglo XIX, Gerda Peridule, para proteger sus ojos de los fluidos corporales.
¿De dónde vienen las pestañas?
La queratina, una sustancia natural producida por el cuerpo humano, se utiliza para fabricar pestañas naturales. Tienen sus raíces en el párpado y se alimentan del folículo. La estructura de las pestañas es similar a la del cabello humano de la cabeza. Las pestañas son principalmente proteínas y contienen una pequeña cantidad de agua (aproximadamente un diez por ciento). Aunque las pestañas se consideran una mejora estética, cumplen una función vital.
Las pestañas postizas cubren una amplia gama de tipos de extensiones de pestañas. Aunque no son un invento nuevo, han recorrido un largo camino desde sus precursoras. A principios del siglo XX, las pestañas postizas se componían de pelo humano natural y se fijaban a una tira de seda o incluso de gasa. El resultado final era similar al de las pestañas postizas actuales, pero no era tan duradero. Las piezas se deshacían con facilidad y no siempre conseguían el aspecto deseado. De hecho, un escritor llegó a describir el aspecto de una mujer "como si se estuvieran recuperando de una pequeña explosión".
Las pestañas postizas han avanzado mucho en los últimos años. Las pestañas postizas están hechas de una serie de materiales, entre los que se encuentran la crin de caballo, la seda, el visón, el pelo sintético y el humano, y son utilizados por un gran número de personas en todo el mundo. Aunque la crin sigue utilizándose en algunos casos, en la actualidad se emplean tres materiales principales para fabricar pestañas postizas.
Conclusión
Gracias al uso de pestañas por parte de algunas de las mujeres más famosas del mundo, las extensiones de pestañas se han hecho un hueco en la corriente dominante. Ahora se pueden comprar pestañas postizas en casi cualquier sitio. Póngase en contacto con nosotros para realizar sus pedidos o preguntar cualquier duda sobre nuestras extensiones de pestañas y estaremos encantados de responderle.
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